desenfrena(me).

perderlo todo contigo. perder trenes y perdernos en cualquier estación, correr sin parar hacia ningún sitio fijo, solo con la seguridad de tenernos el uno al otro. besarte tan fuerte, que parezca un seísmo. tocarte, tocarnos, rozarte tu labio inferior y que las piernas me tiemblen como si estuviera en erupción. contigo no quiero una noche, las quiero todas para sentir tus dulces gemidos salir por tu garganta y que me digas que pare porque no puedes más de placer. hacer de la cama nuestro campo de batalla, y que al tirar toda la ropa al suelo solo queden nuestras ganas de corrernos otra vez. ven, mírame, desenfrena(me).

café, te quieros, y tu llamando a mi puerta.

fuera llueve, y que bonito.

me encantan las mañanas así, en las que me despierto y veo los cristales llenos de gotitas de agua. no se por qué a la gente no le gusta la lluvia, a mi me parece preciosa.

abro el armario de la despensa de la cocina y cojo mi taza de 'the vampire diaries'. pongo un poco de agua en ella y la meto en el microondas. cuando termina la saco y echo una cucharada de café y tres de azúcar, no me gusta el café tan amargo. cojo un bol y echo unos pocos cereales de special k de chocolate negro, y acto seguido me siento en la cama y enciendo el portátil.

quizá lo primero que debería haber hecho sería peinarme un poco, ya que llevo un moño que me hice anoche y voy toda despeinada, pero no me importa.

abro el blog y miro las visitas a mis entradas. todos los días subo una, es una manera de aislarme y de expresarme, de sacar todo lo que llevo dentro ya sea con historias bonitas inventadas como con cosas muy relacionadas conmigo.

suena el móvil, miro la pantalla y es él.

-buenos días dormilona, ¿has visto que día hace hoy? de los que te gustan, aunque ya sabes que a mi los días así no me van mucho.
+hola cariño, acabo de levantarme hace un poquito y estoy tomando café, ¿por qué no coges el paraguas y te vienes? tengo ganas de verte.
-eso me encantaría.
+pues te espero aquí, ¿cómo  vas a querer el café?
-umm, dos de azúcar, y para acompañar un poquito de ti.

AY, COMO SABE COMO PONERME SENSIBLONA.

+de mi tienes todo lo que quieras.
-voy para allá, te quiero pequeña.

y antes de que me de tiempo a contestarle cuelga.

sabe que no le dejaría ganar en eso de los te quieros, soy demasiado cabezota.

me levanto a prepararle el café, y entonces llama al timbre. ¿qué mejor que que llueva, tomar café y que llame a tu puerta el hombre de tu vida?

Sentimientos que se agarran al de mi izquierda.

Abro los ojos, otro nuevo día. De pronto me vienen todas esas malas sensaciones, ese mal estar, no tengo ganas de comenzar otro día de mierda. Cierro los ojos e intento no pensar, volverme a dormir. Pero tenga esa ansiedad en el estómago que baja hasta mi barriga y se queda ahí en forma de nudo. Esa sensación del corazón latiendote tan fuerte que pareciera que jamás va a parar, te culpabilizas de todo lo malo que te pasa y de que nada lo haces bien. Que me digan si no es una mierda sentirse así nada más abrir los ojos. Preparo un café y cojo un cigarrillo de mi paquete de marlboro, lo enciendo, e intento evadirme por un momento de la realidad.

la diosa que hay dentro de mi.

se acerca a mi y me agarra de la cintura. primero me da un beso suave, y luego uno más fuerte, más apasionado, largo. está claro que entre nosotros a parte de amor, hay mucha química, mucha pasión. él saca de mi la diosa que llevo dentro.

-eres tan bonita, tan dulce, tan... sensual.

gimo.

él se percata de que sus palabras causan un gran efecto en mi, y comienza a besarme el cuello. deseo que siga, que no se detenga. necesito de él. muy cerca de mi.

-quiero seguir besándote.
+yo también quiero que sigas.

me muerdo el labio.

sus ojos se llenan de ganas, de deseo, y termina por quitarme la camisa.

de repente me coge en peso y me tumba en la cama, me quita los pantalones y me venda los ojos. no puedo ver nada, y eso me gusta. me excita.

pone las manos en mis senos y los toca dulcemente, casi como si fueran seda.

-me encanta tu cuerpo, cada centímetro de el es tan perfecto..
+por favor, tócame.

su respiración se agita al oírme decir eso. me desabrocha el sujetador, y comienza a besar mis senos. creo que voy a estallar.

antes de seguir repite el mismo proceso, de abajo arriba, pasando por mi sexo.

oigo como desabrocha su pantalón, y entonces siento como mi cuerpo se funde con el suyo. solo él y yo, yo y él.

terminamos y estallamos en múltiples gemidos.

se coloca a mi lado, y me besa la mejilla.

-estas colorada.
+del cansancio, hemos gastado mucha energía.
ríe.
-anda dame un beso, me encanta cuando te sonrojas. pareces tan frágil, tan, niña.
+no lo soy, soy toda una mujer.
-tu lo has dicho. eres toda una mujer, la mujer perfecta para mi.

y entonces, me da un largo beso.

es cuestión de piel.

admito que estando contigo vuelvo a sentirme como una niña. hoy por hoy tengo que culpar a tus manos de que mis piernas tiemblen cada vez que notan que te acercas. es como si notaran esa electricidad y esa atracción que hay entre dos polos totalmente opuestos pero que se entienden muy bien juntos. ¿cómo voy a mostrarme indiferente si me miras con esas pupilas que se adentran en las mías y me ven todo el desastre desde fuera? que me notan que por dentro esta lloviendo aunque por fuera se vea el más radiante de los soles. me conoces tan bien, a veces diría mejor que yo misma. ni si quiera ese vestido que me pongo los días especiales esta tan hecho a mi medida como tu. se que el mundo te ha hecho para mi, para que los dos disfrutemos juntos los sábados haciendo de tu cama una primavera anticipada y para que pasemos los domingos mejor acompañados viendo el mundo desde tu ventana. no hablo de nada perfecto, sino algo solo nuestro. de ser feliz. porque sí. porque te tengo. nos tenemos. de pasarme los lunes por la tarde observando cada parte de ti. mi dedo índice, delineando cada curva de tu cuerpo, desde tu hombro hasta adentrarse en tu cintura, baja hasta tus caderas. no me canso de mirar ese lunar que tienes en el lado derecho del cuello, es como si estuviera ahí para que yo lo observe. no puedo evitar morderte el cuello, aunque también me gusta pasar mi lengua por el lóbulo de tu oreja. mi boca se vuelve impaciente si se trata de tu piel. ya no podría ser igual de feliz si no tuviera todo eso, no sería la misma. no sin ti. a si que no me jodan cuando dicen que si quieres a alguien lo vas a querer ver feliz aunque sea al lado de otra persona porque no me lo trago, porque aunque quisiera verte siempre feliz si no estuvieras conmigo, me desgarraría verte con otra persona que no fuera yo.

earned it.

viernes por la noche:

estamos tirados en la cama, solo llevo unas braguitas y una camiseta después de haber hecho el amor.

-me apetece pizza, ¿qué te parece si llamo para que nos la traigan?
+ummmm que rica, como sabes lo que me gusta.
-pues no se si lo sabré pero llenarme la espalda de arañazos te vuelve loca..
+ ¡no seas tonto! ha sido sin querer..
-¿te piensas que me molesta? son signos de que te gusta hacer el amor conmigo, eso es bueno.

entonces suelto una sonrisa tímida. siempre está haciéndome bromas, a veces me dan ganas de matarle, pero le salen unos hoyuelos detrás de esa sonrisa pícara que.. no puedo decirle nada.

acabo de terminar mi quinto trozo de pizza, de pepperoni, mi favorita, y siento que voy a explotar. le doy un trago al agua.

-¿quieres que bailemos?
+¿bailar? ¿después de engullir toda esta pizza? ¿quieres que me de un corte de digestión?
-no seas tonta, así la bajamos un poco.
+bueno vale.

entonces me tiende la mano, y yo acepto. voy medio despeinada, pero eso a él no le importa. siempre me dice que le gusta cuando voy así, natural.

pone 'earned it', de the weeknd. es una canción que me encanta de la bso de '50 shades of grey', es muy sensual. me agarra por la cintura y pega su cara a la mía. yo me apoyo en su hombro y empezamos a movernos. no soy experta en eso de bailar, pero a su lado todo parece tan sencillo. de un momento a otro, sin apenas darnos cuenta, mi camiseta estaba por el suelo. solo me apetecía seguir. necesitaba de él, de su cuerpo, necesitaba sentirle tan cerca de mi, y entonces le dije:

-te quiero..
+es mucho más que eso, y ahora besame que no quiero desperdiciar el tiempo.

se fue.

un jueves por la noche:

-sígueme contando, ¿qué fue lo que paso?
+la verdad.. no sabría decirte. todo estaba bien, o al menos eso era lo que yo pensaba. yo nunca, nunca había querido a nadie de esa manera, mientras estábamos juntos eramos felices y me quería. después no se lo que pasó, se fue.

todavía me costaba hablar de aquello, era algo muy reciente para mi y lo peor de todo, que no sabía si con el tiempo iba a ser capaz de olvidarle,

-quizá puede que se acojonara, que viera que realmente el mundo le importaba una mierda cuando estaba contigo y eso le asustara, a veces las personas tienen miedo de sentir tanto por alguien.
+pero.. ¿y no se supone que eso es bueno? quiero decir, el amor de verdad es eso, sentir que no podrías mirar a nadie más porque con esa persona lo tienes todo, que realmente si alguien más se te acercara simplemente no te costaría trabajo rechazarlo y decirle 'no necesito a nadie más, la persona que quiero me da todo lo que necesito'. a mi no me acojonaba sentirme así, no porque es demasiado bonito ver que el mundo se reduce a una sola persona y que con ese alguien lo tienes todo y que no te falta nada.
-joder tía.. me lo estas pintando tan bonito.
+lo es, incluso ahora que se ha ido, sigue siendo bonito, porque para mi todo lo que viví con él fue inolvidable.
-te admiro por tener esa valentía para poder expresar todo eso que sientes, realmente ha sido un imbécil por largarse, no sabía lo que tenía teniéndote.

esas palabras me hicieron sonreír, quizá porque sabía que lo que me decía era verdad, que era un imbécil y que no me merecía, que yo era una valiente por atreverme a sentir todo eso incluso cuando no sabía que podía llegarme a pasar todo esto. aún así, eso no hace que duela menos el hecho de que ya no este, y que todos los días siga preguntándome qué fue lo que paso para que de un día para otro se fuera y me olvidara.

me terminé el café y me largue a casa.

micro cuento.

en la ventana de tu cuarto, enciendo un cigarro, llevo puesta la camisa que le quite la noche anterior. me gusta, porque huelo a él y eso me hace sentirme más segura.

-te queda mejor que a mi.
+entonces me la quedo, me la pondré siempre.

me gusta ver como me mira cuando hago algo, como si le fuera la vida en observar cada detalle de mi. he observado de reojo como sigue cada curva de mis piernas cuando estoy haciendo café en la cocina, y antes de que deje de mirar le sonrío y le guiño un ojo haciéndole saber que le he visto. entonces me dice:

-perdona, pero es que me gusta mirarte en cada cosa que haces, eres tan sensual, y desprendes tanto de ti.

no puedo evitar sonrojarme. sabe siempre cuál es la palabra adecuada para hacerme sentir bien, solo él sabe qué decir en cada momento.

-si quieres, después podemos ir a ese café que tanto te gusta y que ponen música tan chula a comernos unos croissants. no pienses en la dieta, quiero que la mañana sea de nosotros.
+umm.. vale, pero antes quiero que me quites esta camisa que dices que me queda tan bien.
-eso me parece perfecto, ¿te parece si nos damos una buena ducha?
+como podría decirte a eso que no..

dejó mi camisa caer al suelo, me dio un beso en el cuello, y nos metimos en la ducha.

otra de tantas noches.

ayer, fue otra de tantas noches en las que tu ausencia se apoderaba de mi. otra de esas noches en las que tu recuerdo llega a mis pensamientos y se instala para provocar necesidad en mi.

23:58, miércoles;

mi cuerpo sigue anhelando tus besos
y tus gélidos abrazos en estas bonitas
noches de otoño. añoro verte dormir.

no sabes lo lento que pasa el tiempo cuando no estás, es como si el mundo no girara y el reloj se parara.

es, como si de pronto mi corazón dejara de bombear sangre y entrara en estado de shock.
se puede estar muerto aunque sigas respirando.

enamorarme de ti solo me costo dos segundos, fue verte la sonrisa y supe que quería verla todos los días.

0:00, miércoles;

otro día más que se termina y sigo
convencida de que tu eres lo que
quiero. lo que necesito a mi lado.

la necesidad de necesitarte. necesidad de ti.

la necesidad de que me necesites, la ausencia de ti que me mata.

nuestro bonito octubre.

a todos les hablo de lo bonito que es estar a tu lado, y la mayoría supongo que estarán hartos, pero es necesidad la de gritar a los cuatro vientos que te tengo y que me haces feliz. no quisiera que vieras la cara de tonta que se me queda cuando suena el móvil y veo que eres tu. hay cosas que matan más que fumar, o que cualquier otra droga, como por ejemplo tu boca, y más cuando sonríes, eso si que es letal. que necesito a diario esa pequeña dosis de ti, necesito un abrazo tuyo como un abrigo en invierno. que sé muy bien que no es normal necesitarte tanto, pero cómo te explico que tampoco es normal lo que me pasa si me tocas, son como punzadas, como si hubiera vida en mi interior. ya veo hasta normal lo de llamar casa a tus brazos y ver como el mayor precipicio tu boca. pero bueno, eso pasa cuando llega alguien como tu, que te pone el mundo patas arribas y a tus pies. que cuando tu llegaste había demasiado caos dentro de mi, y tu lo convertiste en algo bonito, reparaste algo que creía irreparable. octubre es tan bonito, nuestro bonito octubre. la llegada del otoño y tu llegada a mi. ahora cada octubre recuerdo la primera vez que me diste la mano, como todo lo que empezó por ser un juego termino siendo el mejor fuego en el que me he quemado, y dicen que hay infiernos que son bonitos, y yo corroboro eso.